Quitar Óxido

El óxido puede ser el principio del fin para nuestra Camper. ¡Cuidala!
No dejes que el óxido gane la batalla.

¿De verdad es tan peligroso el óxido en nuestra Camper?

En este artículo vamos a explicarte uno de los pasos más olvidados y a la vez más importantes en la camperización: quitar el óxido de la furgoneta. A lo largo del tiempo hay numerosos percances que pueden provocar la aparición de óxido en nuestro vehículo como los golpes o la humedad.

Quitar el óxido no es una cuestión que debamos tomar únicamente desde el punto de vista estético, sino que el no hacerlo puede provocar graves daños en la estructura de nuestra furgoneta llegando a corroer partes de la chapa que entre otros inconvenientes, provocan que nuestro vehículo no pase la ITV.

Quitar óxido de una furgoneta

El proceso de quitar el óxido de una furgoneta se divide en 4 pasos:

1

Vaciar la furgoneta por completo

Con esto nos aseguramos poder localizar el óxido, ya que puede aparecer en cualquier punto del vehículo: chasis, esquinas,bajos, tornillos, motor… ¡En todas partes!. Para llevar a cabo un buen trabajo debemos desmontar todos los componentes que seamos capaces de retirar incluyendo gomas y embellecedores.
No escatimeis esfuerzos en esta fase, ya que todo el tiempo que perdamos en este trabajo hoy será tiempo de tranquilidad en el futuro.

2

Lijado de las zonas oxidadas detectadas

Una vez hemos detectado zonas con óxido visible lo primero que deberemos hacer es lijarlas. Este lijado debería hacer que desapareciese el mítico color rojizo del óxido, dejando ver de nuevo un color gris metalizado más brillante.
Recordad que es importante lijar hasta que desaparezca totalmente el óxido presente, pues de no hacerlo este podría reaparecer con el tiempo.

3

Limpiar a fondo la superficie

Una vez hemos lijado todo a fondo es hora de limpiar el polvo y la grasa que hemos generado en el proceso. Para este paso será suficiente con un trapo y disolvente o alcohol.
El olor que se puede generar en este proceso puede ser tóxico, por lo que no olvides mantener la zona bien ventilada.

4

Aplicación de esmalte antioxidante

Este es el último paso del proceso. Aplicaremos una imprimación para metal y posteriormente pintura, o bien un esmalte antióxido y anticorrosivo en toda la superficie de la chapa. No olvides aplicarla también en zonas donde realizaremos en un futuro cortes para la instalación de claraboyas, etc.

Quitar óxido de la carrocería

En el exterior de la furgoneta es donde más frecuentemente suelen aparecer puntos de óxido ocasionados por algún rasguño que hayamos sufrido. Dependiendo de la profundidad de los daños podemos realizar diferentes procesos que vamos a ver.

Abolladuras de poca profundidad

Para este proceso es recomendable usar una lija de grano fino. Para un lijado más efectivo es recomendable dejar la zona lo más plana posible, para conseguir esto podemos intentar golpear con un martillo desde la parte interior de la furgoneta, mientras alguien hace tope desde la parte exterior, hasta conseguir que la zona quede lo más lisa posible. Una vez sacado para afuera y lijado, procederemos a cubrir la zona afectada con masilla para conseguir nuevamente un acabado liso.

Abolladuras profundas

En el caso de abolladuras más profundas podemos ayudarnos de una pata de cabra y un martillo. Este proceso es un poco engorroso y consiste en ir dando golpes tirando para afuera con la pata de cabra, hasta dejar la chapa lo más parecido a su estado inicial que podamos. Cuando consideremos que la chapa está lo más plana posible rellenaremos el hueco usando una mezcla de masilla y catalizador al 3%, dejando la masilla con una tonalidad un poco rojiza.

Acabado de la zona afectada

Una vez la masilla aplicada en la carrocería esté completamente seca daremos una imprimación de fondo de alto espesor, comúnmente llamado aparejo, para rellenar posibles zonas que no hayan sido cubiertas con la masilla. Cuando esta imprimación se seque volveremos a lijar nuevamente con una lija de grano fino, tras lo cual ya podremos pintarla.

Quitar óxido con vinagre

El método de quitar óxido con vinagre blanco es muy popular y realmente sencillo de aplicar. El ácido acético del vinagre reacciona al contacto con el óxido. Es suficiente con aplicar vinagre sobre la zona afectada cubriéndola lo mejor posible con vinagre durante unos minutos. Por último limpiaremos la zona con agua en abundancia y estará listo.

Quitar óxido con bicarbonato

El proceso de quitar óxido con bicarbonato también es sencillo y económico. Para esto mezclamos el bicarbonato con agua hasta crear una pasta. Con un cepillo de dientes la aplicaremos por la zona oxidada dejando que actúe. Después retiraremos con agua abundante y secaremos la superficie.

Con estos sencillos pasos tendremos nuestra furgoneta libre de óxido y en perfectas condiciones para acometer el resto de mejoras que hagan de ella un hogar móvil.

¡Seguimos!